El desayuno que celebramos el pasado 16 de febrero sirvió además, en esta ocasión, de despedida a la Embajadora Rodríguez Mancia, que en breve se traslada a Ginebra por requerimiento del gobierno de su país. No quisieron dejar de acompañarla las Embajadoras de Costa Rica y Panamá, Doris Osterlof y Mª Mercedes de la Guardia de Corró, respectivamente, así como el Embajador de Honduras, Norman García Paz, entre otros invitados. El Acuerdo de Asociación UE-CA, que abarca tres pilares: comercio, diálogo político y cooperación, y fue firmado en 2012, centró todo el encuentro en el que fueron evaluados sus resultados en los países firmantes, dos años después de su entrada en vigor.

En el caso de Guatemala, la Embajadora Rodríguez Mancia indicó que el crecimiento del comercio entre las dos áreas ha sido exponencial, si bien le queda aún recorrido. Comentó que la firma del Acuerdo suponía, además, nuevas oportunidades de apoyo a las PyME’s, así como de crecimiento tecnológico y protección del medio ambiente, promoviendo la responsabilidad social de las empresas. Destacó la importancia de la firma de este Acuerdo con la UE como bloque, impulsando así la integración regional aunque reconoció que es necesario mejorar las infraestructuras y la conectividad entre los países de Centroamérica para facilitar el transporte de mercancías en la región. En ese afán de reforzar la relación iberoamericana, Guatemala propondrá que la próxima Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno se celebre en su país. A continuación señaló el fortalecimiento de las relaciones comerciales entre España y Guatemala, con un incremento tanto de las importaciones (del 37%) como de las exportaciones (23%), destacando la presencia de 157 empresas españolas instaladas y una inversión extranjera directa que se ha triplicado en los últimos años. Además, España se ha convertido en el 2º emisor de turistas a su país, por detrás del R.U. Por último terminó su intervención señalando la apuesta de su gobierno en la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento de la justicia.

A continuación tomó la palabra el Embajador García Paz, quien insistió en el perfeccionamiento de la integración centroamericana para potenciar el comercio externo, que es el motor de crecimiento de la región. Destacó su enclave estratégico y los tratados comerciales firmados con un gran número de países lo que, unido a sus necesidades en materia de infraestructuras, energía, etc., convierten a esta área en un centro de oportunidades para la inversión extranjera. Concluyó con unas breves palabras sobre la situación económica y política de Honduras, nombrando las acciones contra la corrupción y el narcotráfico que está llevando a cabo su gobierno.

En su turno, de la Embajadora Osterlof aprovechó para elogiar el Acuerdo de Asociación con la UE, que ha fortalecido el proceso de integración comercial en Centroamérica (recordó la importancia que allí tiene el mercado interno), en el que todos los países se están posicionando con sus respectivos productos (como su país con la piña, por ej.) desarrollando la “marca-país”, como en el caso de Costa Rica. Por otra parte indicó que España se está convirtiendo en un mercado cada vez más importante como puerta de entrada a Europa, en especial a la zona sur del continente y norte de África. Por último destacó, entre las acciones en colaboración con la UE, la estrategia de desarrollo rural o la de seguridad alimentaria, en las que España ha intervenido de forma decisiva.

A continuación tomó la palabra la Embajadora de la Guardia, que comenzó destacando la tasa  de crecimiento económico de Panamá, de un 6%, estable durante los últimos años y con previsiones positivas para 2016 y 2017. Apuntó como responsables: la alta tasa de inversión pública, muy enfocada hasta ahora en infraestructuras; un sector servicios muy desarrollado, en especial en servicios legales, financieros o telecomunicaciones; y una clara apuesta de apertura del país al exterior, como plataforma comercial. También insistió en la necesidad de profundizar en la integración de Centroamérica, en especial en su red de transportes.

Por último, y para dar el punto de vista de El Salvador, habló la Sra. Machuca quien ha vivido en Bruselas, como algunos de los Embajadores presentes, el proceso de negociación con la UE desde el Sistema de Preferencias Generalizadas hasta lograr la firma del Tratado de Asociación, el cual ha supuesto también para El Salvador un incremento exponencial de su comercio, destacando además la tendencia, por primera vez, de internacionalización de algunas empresas salvadoreñas en Europa. Por último habló del Plan Quinquenal de Desarrollo que está llevando a cabo el gobierno de su país y que contempla tres prioridades: la atracción de inversiones, la creación de empleos de calidad y la educación.

El desayuno concluyó con el habitual coloquio con el resto de asistentes en el que se tocaron varios temas como la implantación de estrategias de salud digital y en el que se profundizó en la integración regional con la puesta en marcha de distintas políticas, para que Centroamérica sea considerada en su conjunto, aumentando así su peso específico en el mundo.