México es la decimoquinta economía más grande del mundo y la segunda de América Latina, según el FMI. Asimismo, es el país número 13 entre los principales exportadores a nivel mundial, y el primero de América Latina, según la OMC. Con una sólida estructura macroeconómica, una inflación controlada, un notable aumento de la producción per cápita y la apertura de su comercio a los mercados internacionales, es un destino muy apreciado para la inversión internacional.

El nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador tiene, sin embargo, grandes desafíos para su legislatura. Seguir apostando por la apertura comercial, la inversión extranjera directa,  la integración en las cadenas globales de valor o impulsar la innovación para aumentar la productividad son algunos retos para lograr un crecimiento económico sostenido e inclusivo.

Precisamente en esa apuesta por el libre comercio sobre la base de normas justas y requisitos estrictos, México y la Unión Europea llegaron el pasado 28 de abril a un “acuerdo de principio” para la actualización de la parte comercial del Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación firmado en 1997 y que entró en vigor en el 2000 entre estas dos áreas del mundo que comparten, además, principios y valores y que forman parte del mundo occidental. En este sentido, durante la visita de la Alta Representante de la Unión Europea, Federica Mogherini, a Ciudad de México el pasado mes de septiembre, se han concluido las negociaciones de los apartados de Diálogo Político y de Cooperación. 

El V Foro México-Unión Europea: Los desafíos mexicanos y europeos: sinergias en ambos sentidos, que tendrá lugar en Ciudad de México durante dos mañanas, será el quinto encuentro que la Fundación Euroamérica organiza en este país, en el marco de las conferencias que organiza anualmente en Latinoamérica, ofreciendo un espacio de debate único para analizar y valorar la situación actual y futura de las relaciones entre ambas partes. Este Foro servirá para identificar aquellas áreas donde la cooperación y el intercambio de experiencias puedan ser más beneficiosos para todos y contará con importantes personalidades mexicanas y europeas que intercambiarán opiniones sobre los aspectos más relevantes de los ámbitos político, económico, digital y financiero, con temas transversales como la innovación, ante un selecto grupo de dirigentes empresariales, diplomáticos e institucionales de ambos lados del Atlántico.

Primera jornada, 16 de octubre

Sesión de inauguración e intervenciones especiales de apertura

Primera sesión: La modernización del Acuerdo Global México-UE: un nuevo marco para las relaciones comerciales

Segunda sesión: Las relaciones comerciales entre México y la Unión Europea en ambos sentidos. La internacionalización de la empresa

Tercera sesión: Claves para el crecimiento económico de México. El rol del sector financiero en el desarrollo económico inclusivo. La digitalización en la banca

Cuarta sesión: Innovación e investigación: su impacto en el bienestar social

Cóctel de clausura de la primera jornada

Visita al Museo Nacional Antropológico de México, organizada por el Subsecretario de Turismo de México, Humberto Hernández Haddad 

Segunda jornada, 17 de octubre

Diálogo de inauguración: La Asociación Estratégica México-Unión Europea a la luz del nuevo escenario internacional: La modernización del Acuerdo Global México-UE

Primera sesión: El papel de las infraestructuras y las TIC’s en la integración económica y social. Financiación de las obras públicas: modelos de asociación público-privada

Segunda sesión: El sector energético de México: objetivos a corto y largo plazo

Intervención especial de clausura: El turismo como motor de desarrollo económico inclusivo y sostenible

Almuerzo de clausura
Intervención especial: Alfonso Romo Garza, Jefe de la Oficina de la Presidencia de la República. Presidente del Consejo para el Fomento a la inversión, el empleo y el crecimiento económico

México: balance de un Encuentro

La Fundación Euroamérica en Ciudad de México.

¿Quo Vadis México? enormes expectativas y grandes preocupaciones, potencialidades inmensas y carencias históricas. Una demografía espectacular, un alto nivel cualitativo en sus élites y una realidad social inquietante. Este tipo de contradicciones podrían extenderse a múltiples planos de ese país. México lindo y querido, como dice la ranchera, pero México duro y dolorido también por la inequidad y la inseguridad de su pueblo.

A lo largo de dos intensas jornadas los pasados 16 y 17 de octubre hemos vivido en Ciudad de México la estrecha relación entre empresa y gobierno, las enormes esperanzas que los dirigentes mexicanos tienen en el futuro del país. Hemos conocido de primera mano los planes del gobierno en infraestructuras, energía, finanzas, turismo, comercio internacional, política exterior, innovación etc. Hemos escuchado y hemos debatido con los principales mandatarios mexicanos, desde el ministro de exteriores, Marcelo Ebrard, hasta el Jefe de la Oficina de Presidencia, el Ingeniero Alfonso Romo. Hemos conectado a las grandes compañías europeas y mexicanas con estas autoridades y hemos intercambiado planes e inquietudes en la búsqueda de una mayor inversión europea con un país enfrascado en grandes proyectos transformadores y modernizadores y volcado en ambas latitudes. Y debo decirles que el Foro  ha sido un éxito redondo en todos los planos. En las formas (asistencia, desarrollo de las ponencias) y en los contenidos. Y en el conocimiento mutuo de planes y marcos de colaboración.

Tres ejes destacan este importante Foro

Primero: Su oportunidad

El Foro se ha producido en los días finales de la negociación de la Modernización del Acuerdo UE-México que ya cumple veinte años. Es más que probable que un Nuevo Acuerdo Actualizado y Modernizado a las grandes transformaciones producidas en estos últimos veinte años será firmado a finales de este año y pueda entrar en vigor ( su parte económica comercial) a finales de 2020, una vez ratificado por el Senado Mexicano y por el Parlamento Europeo.

Paralelamente en junio de 2019, el Consejo Coordinador Empresarial y el gobierno de México en la persona de su máxima autoridad el Presidente  de la República López Obrador firmaron el “Acuerdo entre el Gobierno Federal y el CCE para favorecer la Inversión y el Desarrollo Incluyente” en el, que entre otras cosas, acordaban un volumen de inversión del 25% del PIB anual, distribuido entre el 5% de inversión pública y el 20% de inversión privada.

Ambas circunstancias económicas abrían y abren un marco de extraordinaria oportunidad para las empresas europeas y mexicanas que la Fundación Euroamérica quería aprovechar.

Segundo: El marco institucional

México tiene un gobierno nuevo (inició su mandato a principios de 2019), apoyado por una mayoría absoluta que proporciona un horizonte de máxima estabilidad. El apoyo social que recibió MORENA fue extraordinario. La popularidad que sostiene al Presidente de la República López Obrador es enorme. La perspectiva, por  tanto, de que un marco institucional estable se perpetúe los próximos cinco años -como mínimo,  añaden al país un horizonte y una seguridad jurídica siempre necesarios en los planes económicos y de inversión principalmente.

A ello hay que añadir la voluntad, reiteradamente manifestada por los interlocutores del gobierno, de fortalecer las instituciones y el funcionamiento democrático del Estado. Es verdad que la  inseguridad, el crimen organizado y la debilidad policial constituyen un reto gravísimo a esos planos, pero no es menos cierto que hemos comprobado la voluntad férrea de afrontar este desafío con urgencia y esperamos que con eficiencia.

A destacar que, en esta lucha, el gobierno ha impuesto un programa anticorrupción verdaderamente draconiano. El camino en los dos planos será largo y duro, acontecimientos como el de Sinaloa, ocurridos el jueves pasado, cuando regresábamos a Madrid, resultan descorazonadores, es la verdad. Quiero creer que el gobierno ha aprendido la lección y  acelerará los trabajos para la creación de un Cuerpo Nacional de Policía y reforzará el sistema judicial penal, entre otras medidas.

Tercero: El crecimiento

Si una conclusión de nuestro encuentro destacó sobre otras, fue la apuesta del Gobierno por el crecimiento económico como condición inexcusable de futuras redistribuciones

El Ing. Alfonso Romo, hombre fuerte de la presidencia, nos honró con un discurso final de las jornadas absolutamente rotundo en esta dirección. Hay pocas dudas sobre el pensamiento económico de Romo. Hombre forjado en la empresa, en la gestión internacional, conocedor del mundo económico y de los mercados, aseguró a la audiencia que los planes del Gobierno son dar estabilidad jurídica y macroeconómica al mundo empresarial y favorecer el crecimiento económico. La redistribución es consecuencia, no causa del crecimiento.

Cabe decir que la voluntad del Presidente de no aumentar la presión fiscal es un límite a las políticas Keynesianas del Estado, que tanto necesita México, pero ese es un compromiso electoral que desean cumplir. Por el contrario, su firme voluntad de mantener un marco de colaboración contractual y comercial con EEUU es condición inexcusable de crecimiento dado el importante efecto de la industria manufacturera sobre su PIB ( aprox. del 30%). En la misma línea su voluntad exportadora a Europa y la internacionalización de sus grandes compañías son pilares fundamentales de su estrategia económica. A destacar la difícil situación energética  y financiera de su gran compañía PEMEX.

De manera que tres palabras resumen el proyecto de López Obrador de 2020: estabilidad, seguridad y crecimiento. Cabe añadir una cuarta que nos trasladaba el Canciller Ebrard en  su discurso inaugural: responsabilidad. Esta apelación un poco Kennedyana a lo que cada mexicano puede -y debe- hacer por su país está también en el centro del discurso político del gobierno y forma parte de una difícil transformación de la cultura política del país.

La Fundación Euroamérica se siente satisfecha del trabajo realizado en una de sus principales actividades (el Foro anual en un país latinoamericano) respondiendo a su razón de ser: impulsar, desde la sociedad civil, el contacto y las relaciones entre Europa y América Latina. Agradecemos a las empresas patrocinadoras del encuentro su esfuerzo y su comprensión en esta tarea y reiteramos al gobierno mexicano y a sus Embajadores en Bruselas y Madrid su estrecha y eficaz colaboración.

Ramón Jáuregui

Presidente de la Fundación Euroamérica